Plataforma
ciudadana No me quites mi hospital
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Aniversario. Comunicado 21 de febrero de 2019
Hace
exactamente 10 años, un grupo de sanitarios del hospital Infantil
decidió rebelarse contra lo que consideraba una injusticia: que la
promesa de la construcción de un nuevo Materno-Infantil,
anunciada a bombo y platillo por la entonces Consejera de Sanidad, la
Sra. Montero, no era más que papel mojado. Los niños pasaban a la
cola en las reformas previstas y estas se alejaban de forma tajante
de lo anteriormente propuesto. El personal del Materno-Infantil casi
al completo y muchos otros profesionales del Hospital se unieron a
esa primera Asociación
Pro-Hospital del Niño y la Mujer,
pero era necesario que las familias también formaran parte de la
reivindicación, pues eran ellas las que sufrían directamente la
falta de espacio, la escasez de habitaciones, las esperas para poder
ingresar, los pasillos abarrotados, las diminutas consultas y las
ventanas tapiadas, tristes compañeras en los ingresos. Por eso fue
fácil reunir a aquellos padres a los que la terrible carga de un
cáncer en sus hijos no impidió que sacaran de su interior esa
fuerza que necesitábamos para recoger firmas, divulgar la lucha
entre las demás familias, hablar con los medios, con los políticos
de turno o buscar nuevas asociaciones que se unieran a la causa.
Podríamos nombrar a muchos de ellos pero seguro que dejaríamos a
alguno y no sería justo, mejor hablar de cómo vencían el temor por
su inexperiencia ante los micrófonos, de cómo sacaban fuerzas para
reivindicar aquello en lo que creían y eso que algunos regresaban
después a la pequeña cárcel de Onco-hematología para seguir
apoyando a sus hijos. También podríamos hablar de los que perdieron
esa batalla y exhaustos, se apartaron con el corazón encogido,
aunque sabemos que aún su fuerza nos acompaña. No es fácil luchar
como ellos han luchado, no es fácil reclutar
60000 firmas que
son voces de las gentes de esta provincia y otras partes de
Andalucía, no es fácil reunir a más
de 30 asociaciones
de enfermos, sociales y sindicatos y algo tendremos de razón cuando
la misma Asociación
Española de Pediatría
se adhirió a la causa.
Y
aunque a día de hoy sabemos que no nos han devuelto aún el proyecto
del HMI que se prometió, gracias a la fuerza de esta Plataforma el
Defensor del Pueblo
Andaluz decretó el
estado deficiente del actual MI y exigió medidas para paliarlo
mientras se proyectaba su relevo y por ello las reformas que se le
han ido realizando, durante años se consiguió frenar el tapiado
posterior del Infantil gracias a una protesta llevada a cabo en este
mismo lugar, se denunció el exceso de ruido en las habitaciones de
los niños por los aparatos de aire acondicionado de las nuevas
dependencias para adultos y se logró el cerramiento de las mismas,
se denunció la falta de salas de juegos para niños de oncología y
se abrió una, también la falta de espacio en las habitaciones de
oncohematología y se realizaron obras para ampliarlas, hemos
presentado informes de las deficiencias al Jefe de Servicio de
Pediatría, a la Gerente y a la Delegada de Salud y hemos conseguido
que cada vez que un dirigente político visite Córdoba, algún
periodista le pregunte siempre por la exigencia de NMQMH.
Durante
estos años hemos visto movimientos y plataformas ciudadanas que
nacen y mueren ahogadas por el esfuerzo prolongado y el tiempo, pero
esto no le ha ocurrido a NMQMH. Ni las olas de la crisis económica,
ni las de los repetidos proyectos pre-electorales lo han conseguido.
La única razón para que esta Plataforma perdure en su lucha es que
todos los que la integramos y seguimos creemos
que es posible ese nuevo Materno-Infantil
donde los pequeños pacientes y sus familias sólo tengan que
preocuparse de su curación, un recinto amable, pensado para las
demandas actuales, espacioso, seguro, luminoso y moderno. Por
desgracia, del anterior gobierno andaluz sólo obtuvimos promesas de
proyectos deficientes y sin presupuestos asignados, o sea, humo. Se
abre un nuevo panorama, la crisis parece apaciguarse y nuevos
gobernantes prometen cambios. Lo que no cambiará es la lucha para
conseguir este sueño compartido por tantos; pediremos reuniones,
expondremos ideas, exigiremos que se cumplan las normativas y los
derechos de los niños hospitalizados, plantearemos de nuevo las
deficiencias de las infraestructuras actuales, exigiremos un proyecto
con presupuesto y propondremos la mejor solución que nos es otra que
un nuevo HMI.
Muchas
gracias a todos por mantener la llama encendida durante estos diez
años, por avivar la ilusión y seguir trabajando con No
me quites mi hospital.
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